Hermanos y Enemigos

Los basquetbolistas Vlade Divac y Drazen Petrovic eran buenos amigos, sin embargo, una guerra dividió su amistad para siempre.

Vlade Divac y Drazen Petrovic enfrentándose en un partido de la NBA.

Vlade Divac y Drazen Petrovic fueron dos basquetbolistas profesionales durante finales del siglo 20. Ambos representaban a la selección de Yugoslavia, país que estaba conformado por diferentes naciones y que en ese entonces, era una de las mejores del mundo en el básquet.

Divac nació en la nación de Serbia, mientras que Petrovic creció en la nación de Croacia. Divac fue el primero en llegar a la selección yugoslava, convirtiéndose en uno de los jugadores más importantes para el equipo y para los fanáticos. Sin embargo, también se hablaba de Drazen Petrovic, joven jugador que era voceado como una posible estrella mundial en aquel deporte.

Drazen fue muy dedicado al básquet, practicaba en su casa, como si fuese una cancha profesional. Siempre creía que algun día sería el mejor jugador del mundo. Afuera de los campos deportivos, era tranquilo, mientras que al jugar, era todo lo contrario. Sus compañeros de la selección lo describen como una persona centrada en el básquet y no solía conversar de otros temas que no fuesen relacionados al deporte que él amaba.

Divac y Petrovic compartían habitación antes de los partidos y es ahí donde lograron formar una amistad. A pesar de que ambos tenían personalidades diferentes, ambos llegaron a ser como hermanos. Todo esto, se vio reflejado en los partidos disputados con la selección, donde consiguieron varios títulos y pudieron ser considerados por los rivales, como un equipo envidiable y de temer.

Lamentablemente, las diferentes naciones que conformaban Yugoslavia, se empezaban a dividir. En ese entonces, debido a las buenas actuaciones de ambos basquetbolistas, Drazen y Vlade firman por equipos de la NBA: los Blazers y Los Angeles Lakers. Ambos buscaban adaptarse a la vida en los Estados Unidos durante su estadía como jugadores.

Los compañeros y entrenadores de Divac lo consideraban como un jugador asombroso, no solo por su altura, sino por sus jugadas que realizaba en los partidos de la liga estadounidense. Sin embargo, Petrovic vivía todo lo contrario. No pudo adaptarse a la NBA, no entraba a jugar y se sentía frustrado. Su hermano del básquet, Divac, lo apoyaba en esos momentos difíciles. Por ello, decidió cambiar de club, con el objetivo de lograr su mejor nivel.

En el campeonato mundial disputado en Argentina, Yugoslavia jugó la final contra la Unión Soviética, logrando el título. Sin embargo, durante la celebración del equipo, un hincha entró al campo de juego con una bandera croata, generando el enojo de Vlade Divac, quien apartó la bandera que tenía el fanático con el objetivo de mantener unida a la selección. Esa acción fue considerada como un insulto por Petrovic, quien decidió acabar la amistad con el quien había sido su gran amigo y hermano del básquet, Vlade Divac.

Cuando ambos jugadores volvieron a sus respectivos clubes de la NBA, Petrovic había cambiado, ya no era el mismo. Evitaba intercambiar palabras cada vez que sus equipos se enfrentaban entre sí. Se sentía ofendido y sorprendido por lo que su amigo había hecho.